24 enero 2006

Costumbres
   publicado por TioP

Leyendo el otro día a nuestro compañero blogero de Piensa en Verde, vi que hacía mención a manías, costumbres, hábitos... y hoy, recordándolo, me ha dado por escribir un poquillo re-utilizando la idea. El caso es que todos tenemos ciertas “rarezas” que nos distinguen, o bien ninguna, lo que también hará que se nos distinga por ser sencillos... Sinceramente, me incluyo en los que tienen manías y/o costumbres quizá algo peculiares. No enumeraré todas, tampoco creo las recuerde, pero si comentaré las que más gracia me hagan por su rareza en según que casos. Lo primero de todo os hablaré de la actualidad, luego aun comentaré alguna del pasado.

Pues bien, me suelo vestir en un orden estricto y que parece no ser el habitual. Casi siempre he de ponerme la camisa antes que el pantalón. Pero a la hora de desvestirme utilizo método FIFO (first input, first output), pues la camisa se quita antes que el pantalón. Pero, curiosamente, a la hora de poner el pijama (sí! uso pijama, qué pasa!) me pongo antes el pantalón... manías.

La ubicación de los accesorios dentro de la vestimenta también tiene posiciones fijas e inalterables. La cartera siempre, y digo siempre, irá en el bolsillo derecho del pantalón, sin nada más. Las llaves y monedas compartirán el bolsillo izquierdo, nunca podrán ir en el derecho ni en los traseros. Estos bolsillos, en caso de existir, únicamente podrán llevar algún clinex, nunca nada más. El colmo reside en cuando uno lleva americana, pues el bolsillo interior derecho es para cuando las monedas superan un número considerable, y el izquierdo para el móvil.

Si nos centramos en el coche, se evitará aparcar en batería, en los parkings se buscarán esquinas o sitios individuales, y en los supermercados, la lejanía... se evita por tanto, tener a los torpes cerca de mi coche.

Y ahora, el desmadre de cabeza total. De pequeño, cuando cogía el ascensor para ir al colegio, el botón para llamarlo no era el típico digital o de OTIS, sino que ponía literalmente en pequeñito e iluminado, la palabra ascensor. ¿Y qué se me ocurrió en su día? Pensar en nombres de animales que empezaran por cada una de las letras que componen la palabra, y sin repetir. ¿Se os ocurren? Os dejaré pensar. Al final os pondré cuáles fueron los que elegí y que no se me han olvidado, de hecho me los sé mejor y más rápido que cualquier otra chorrada, ¡no tengo ni que pensarlos!. El colmo era que los repetía tantas veces de camino al colegio, que ahora no hay quien me los saque de la cabeza, y es que si veo a alguno de ellos, pienso en ascensor!!! (esto último no es cierto, porque no dejaría de ver animales con forma de ascensor).

Más cosas, más cosas... pues internet. El apasionante mundo de la música y películas... y es que la posibilidad de hacer copias de seguridad de todo, es atrayente... estoy enganchadíiiiiiisimo.

Águila, Serpiente, Caracol, Erizo, Nutria, Sapo, Oso, Ratón.